Las características geológicas del terreno cercano a Rodanas pueden originar cavidades de la que es famosa la llamada "Cueva del Gato". A escasos 30 minutos del Santuario podemos acercarnos hasta ella provistos de alguna linterna para acceder por el oscuro acceso. Una vez dentro, nuestra vista se acostumbrará rápidamente cuando accedamos a la estancia principal, iluminada por la luz que penetra por un antiguo desprendimiento.